Sabemos que el proceso de crianza es una labor muy compleja, porque todo el tiempo hay que tomar decisiones certeras que impulsen la vida de los niños hacia un mejor futuro. Una de ellas, es optar por un buen plan nutrimental que les haga gozar de un desarrollo positivo en la adultez, esto podría resultar una obviedad pero, aunque parezca irreal aún en pleno siglo XXI, según datos de la UNICEF, más de 340 millones de niños sufren carencias de micronutrientes esenciales como vitaminas y minerales y por lo menos uno de cada dos niños, padece hambre oculta. Lo que nos lleva a deducir que la mala nutrición y desnutrición no sólo tiene que ver con la falta de acceso a alimentos sino al desconocimiento de una alimentación adecuada.
Mitos y desinformación sobre la alimentación infantil
Podríamos creer que la malnutrición infantil solo afecta a ciertos países pero no es así. Muchos de los problemas de alimentación en los niños y jóvenes se debe a la desinformación en todo el mundo. La gran mayoría de los niños no comen los alimentos que necesitan, en cambio ingieren demasiados dulces, refrescos y otros edulcorantes. Este tipo de dietas son promovidas por la publicidad de la industria de comida ultra procesada, la cual se basa en la desinformación que suele comenzar en los hogares y continuar en los ambientes escolares, donde los niños tienen un mayor acceso a ese tipo de productos sin ninguna medida de control, ocasionando problemas de sobrepeso, obesidad y hambre oculta, mismos que podrían ser causantes de diabetes infantil, problemas de retraso en el crecimiento físico y cognitivo, en entre otros. El desconocimiento sobre qué es una buena alimentación en niños y jóvenes, se justifica alrededor de varios mitos, por ejemplo, muchos padres creen que la fórmula láctea durante las primeras etapas de vida, es la mejor idea de alimentación, es una creencia muy común pero con graves consecuencias negativas, ya que provoca desnutrición debido a la carencia de nutrientes esenciales y ácidos grasos en la vida temprana de los niños. Otro error común, es creer que en sus tres primeros años no necesitan de alimentos enteros o sólidos y se tiende a ofrecerles solo papillas, muchas de ellas procesadas, sin ninguna recomendación nutrimental. Estos simples detalles extendidos por la desinformación, deben ser cambiados con urgencia y elegir una nutrición sana y balanceada.
No obstante, y aunque ha sido un proceso largo, porque implica cambios de hábitos alimenticios, cada vez más familias eligen una dieta saludable, contemplando granos enteros, verduras, frutas, nueces y otros suplementos altos en ácidos grasos como el Omega-3, para impulsar el desarrollo cognitivo de los pequeños, porque estimulan la perfusión cerebral, clave para el desenvolvimiento de su memoria, lenguaje, aprendizaje.
Pero, ¿en realidad sabemos qué tipo de alimentos necesitan los niños según sus necesidades? ¿Cómo podríamos estar seguros de que reciben los nutrientes necesarios? Estas son preguntas constantes, sobre todo cuando sabemos que los niños y jóvenes siempre están expuestos a comida ultra procesada. En USANA México, preocupados por esta situación, hemos creado una línea de suplementos para niños y adolescentes que sirven como un soporte nutricional para esas personitas que tanto nos importan. Usanimals es un complejo vitamínico que será el encargado de aportar la dosis diaria y adecuada de vitaminas A, B y C. Otro suplemento que no debería faltar en tu despensa, es el BiOmega Jr, el cual está diseñado para complementar la ingesta alimenticia de ácidos grasos y otros micronutrientes vitales elevar sus niveles de energía, protegiendo a nivel celular, sus órganos como el corazón, hígado o riñón.
Con USANA la alimentación en niños y adolescentes puede comenzar con el pie derecho, porque nutrir a las infancias es una labor común.