Tus huesos y tus articulaciones hacen mucho por ti. Algunas de sus funciones son darle forma al cuerpo, soportar el peso de éste y brindarte movilidad. Conoce más al respecto en este artículo.

¿De qué están hechos el esqueleto y las articulaciones?

El sistema óseo, al igual que los demás, está hecho de células que cumplen con funciones específicas, incluso crear huesos nuevos. En los huesos existen tres tipos de células que ayudan a mantenerlos en óptimas condiciones.  

Osteoblastos: son las células constructoras del hueso.

Osteocitos: las cuales son células óseas maduras.

Osteoclastos: células que abren espacio sobre y dentro de los huesos para los músculos y los vasos sanguíneos.

Por su parte, las articulaciones son áreas en donde se encuentran dos o más huesos. La función principal de estas es que los huesos se puedan mover, y constan de lo siguiente: cartílago, membrana sinovial, ligamentos, tendones, bursas (bolsa sinovial), líquido sinovial, meniscos y huesos como el fémur, la tibia y rótula.

Un par de datos que debes conocer sobre los huesos y las articulaciones

Huesos

Los huesos cambian continuamente, como nosotros, y es que el cuerpo genera nuevo tejido óseo cuando el existente ya está muy desgastado. Vale la pena enfatizar que una persona joven produce más rápido nuevo tejido óseo, en comparación con el que desgasta, por esa razón su densidad ósea aumenta. 

La mayoría de las personas alcanzan su máxima densidad ósea a los 30 años (en promedio). Después de esa edad la remodelación ósea continúa, sin embargo, se pierde ligeramente más densidad ósea de la que se puede ganar.

Articulaciones

Los huesos están cubiertos por una capa llamada cartílago articular, la cual los cubre por los extremos. Este cartílago se compone por células articulares altamente especializadas (condrocitos), las cuales viven en un entorno similar al de un gel llamado matriz extracelular. Dicha matriz alberga agua, colágeno y otras proteínas no colágenas, todo esto necesitan las articulaciones para llevar a cabo sus funciones.

Cuando las articulaciones están saludables, se le permite a los huesos mantener su capacidad de movimiento, gracias a ello, las personas son capaces de desplazarse, de realizar distintas actividades físicas y de no parar en el día a día.

¿Qué se puede hacer para mantener huesos y articulaciones al 100?

1. Controlar el aumento de peso, con el objetivo de evitar presión excesiva en huesos y articulaciones.

2. Realizar ejercicio de intensidad moderada para mantener fuertes tus articulaciones, huesos y músculos.

3. Seguir una alimentación variada, la cual aporte nutrientes (tanto a los huesos como a las articulaciones). Por ejemplo, la vitamina C está relacionada con la producción de colágeno, pues apoya y brinda fuerza y estabilidad a los tejidos conectivos. Mientras que el magnesio ayuda a darle fuerza al colágeno.

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