El ejercicio es una parte fundamental para tener una vida saludable, pero a menudo olvidamos que nuestra piel también necesita atención especial durante esta actividad. Sudar y la exposición al sol pueden afectarla, por lo que es esencial aprender cómo cuidar adecuadamente de nuestra piel mientras nos mantenemos activos.
En esta nota de blog, te daremos consejos prácticos para mantener una piel radiante.
Antes del Entrenamiento:
Limpieza suave: Antes de comenzar, limpia tu rostro con un limpiador suave para eliminar cualquier rastro de maquillaje y suciedad. Esto permite que tu piel respire.
Protector solar: Si te ejercitas al aire libre, aplica protector solar con un SPF adecuado para proteger tu piel de los daños causados por los rayos UV.
Durante el Entrenamiento:
Evita tocarte la cara: Las manos pueden tener bacterias y suciedad, así que evita tocar tu rostro.
Toallas limpias: Lleva una toalla limpia para secar el sudor de tu rostro de manera suave y evitar irritaciones.
Después del Entrenamiento:
Bañate: No demores mucho en bañarte después de hacer ejercicio. El sudor puede obstruir los poros, lo que puede llevar a brotes de acné.
Exfoliación suave: Añade una exfoliación suave una o dos veces por semana para eliminar las células muertas de la piel y evitar la obstrucción de los poros.
Al seguir estos consejos y prestar atención a las necesidades de tu piel, podrás disfrutar de los beneficios del ejercicio sin comprometer la salud de tu cutis. ¡Así que sigue sudando y mejorando tu salud.
