¿Por qué necesitas un “Gimnasio para la mente y la memoria''?

El cuerpo no es el único que necesita acudir al gimnasio, también tu mente. Al incorporarlo, junto con alimentos ricos en Omega-3 y Coenzima Q10, podrás contribuir a mejorar más allá de tu memoria. Toma nota.

La memoria es uno de los principales motores de nuestra mente. Gracias a ella, podemos codificar, almacenar y obtener toda clase de recuerdos; nos permite construir planes futuros, a partir de las vivencias que ya hemos tenido.

Aunque, y al igual que cualquier sistema, la memoria puede llegar a sufrir deterioros generados por el envejecimiento normal, falta de sueño, ansiedad y depresión, entre otros factores.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), calcula que las enfermedades relacionadas con la pérdida o alteración de la memoria alcanzarán a 82 millones de personas en 2030 y 152 millones en 2050.

Para reducir el impacto que estas pueden generar en nuestra memoria, quizá quieras incorporar un “Gimnasio para la Mente”. Te contamos.

¿Cómo cuidar nuestra memoria desde ya?

De acuerdo con Pedro López, director de Liceum, “Gimnasios para la Mente”, es importante que recurramos a ciertos ejercicios para entrenar y fortalecer la memoria, y las habilidades cognitivas, que nos permiten realizar nuestra rutina diaria.

Muchas de estas actividades están relacionadas con juegos como el ajedrez, el teatro y el arte, el yoga y la meditación que, además de ayudarnos a cuidar la memoria, pueden reducir los niveles de ansiedad y estrés.

Una manera más de lograrlo es:

1. Mejorar el descanso durmiendo 7.5 y 9 horas por noche.

2. Encontrar un balance entre las responsabilidades profesionales y personales.

3. Tratar de reír más porque hacerlo implica una serie de tareas que involucran a nuestra mente. Por otra parte, genera serotonina.

4. Involucrar ejercicio cardiovascular.

Al incorporar uno o varios de estos ejercicios a la vida diaria, estaremos creando un “Gimnasio para la Mente”, en donde el cerebro podrá mantenerse en forma y agilizar todas aquellas conexiones que potencialicen nuestras capacidades.

Si bien, este “Gimnasio para la Mente”, mantendrá la mente activa al nutrirse constantemente con juegos interactivos, ejercicios de respiración y físicos, no quiere decir que tenga el poder de evitar o curar enfermedades degenerativas.

No obstante, existe la posibilidad de que ayude a estabilizarlas y a retrasar sus efectos con el paso de los años. Otra manera de complementar esta labor de ejercitar a la mente, y por ende a la memoria, es por medio de ciertos suplementos y alimentos.

Alimentación para la memoria

Una de las recomendaciones más citadas por médicos es mantener una dieta balanceada. Es decir, que las frutas, verduras, granos integrales, aceite de oliva, nueces, pescado y proteínas magras, tendrán que ocupar un lugar estelar en el plato del buen comer.

Cuando nos volvemos conscientes de los nutrientes que se encuentran en los alimentos, será más sencillo desarrollar una mejor relación con nuestro cuerpo y mente.

Por otra parte, existen suplementos alimenticios que rescatan lo mejor de los alimentos, como el Omega-3, que son un grupo de ácidos grasos poliinsaturados. Aunque no es el único que juega un papel clave.

Ellos pueden ser tus mejores aliados

La labor del Omega-3 se encuentra en explotar de manera benéfica los nutrientes de los tejidos del pescado azul y ciertos mariscos, así como capturar lo mejor del aceite de canola, las nueces y las semillas de linaza.

También se le conoce como: “alimento para el cerebro”, debido a que no solo contribuye a fortalecer y mejorar la memoria; influye en retrasar el envejecimiento neuronal y combatir la depresión o trastornos como el déficit de atención e hiperactividad.

Dentro de toda esta capacidad, el Omega-3, cuida al corazón, tiene acciones antiinflamatorias y anticoagulantes, ayuda a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos y mucho más. ¡Sorprendente! ¿No lo crees?

A la par del Omega-3, existe la vitamina Q10 o Coenzima Q10. Ella es responsable de ayudar a estas pequeñas estructuras de una célula; mejor conocidas como mitocondrias, a generar energía y a prevenir el daño que ciertas sustancias generan en nuestra mente y cuerpo.

Normalmente, la Coenzima Q10, acompaña a los alimentos más fuertes, como la comida porque permite que el sistema digestivo pueda garantizar su adecuada absorción y, de acuerdo con el Centro de Investigación Biomédica en Red-Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición (CIBERobn), ayuda a disminuir el estrés oxidativo.

El Instituto Nacional del Cáncer, menciona que a pesar de que la Coenzima Q10, está presente en la mayoría de los tejidos del cuerpo, como el corazón, el hígado, los riñones y el páncreas, va disminuyendo en el cuerpo a medida que la gente envejece.

Por esta razón, es importante incorporar alimentos y/o suplementos ricos en esta vitamina, pero antes de que tomes cualquier decisión, te recomendamos acudir con un especialista porque podrá indicar si requieres tanto el omega-3 como la Coenzima Q10 y en qué dosis.

Dicho esto, te invitamos a construir tu “Gimnasio para la Mente” con una barra de alimentos saludables.