¿Alguna vez te has sorprendido jugando algo que de pequeño anhelabas? Por ejemplo, ves a un pequeño en el parque jugando cochecitos y te trae recuerdos; o muchos pequeños jugando a las escondidas. ¿Qué pasa por tu mente? 

Todos tenemos un niño interior, y este se encuentra en la parte de nuestro inconsciente, ahí se quedó atrapado para seguirnos conectando con la curiosidad, creatividad y el asombro. Le has preguntado, ¿cómo está?

Nuestro niño interior se forma a partir de experiencias de la infancia, cuando aprendemos valores, límites, juegos e incluso interacciones sociales con otros. La formación de ese niño interior, muchas veces, tiene experiencias negativas que lo dañan; generando así heridas que lo lastiman. ¿Esto cómo afecta a mi yo del presente? 

Pareciera que en nuestro mundo todo lo que nos sucede es a causa del presente, pero no es así; nuestro pasado influye más de lo que imaginas y es que las heridas emocionales que aún le duelen a tu niño interior te siguen lastimando en este presente, causando diversas emociones que pueden dañar tu autoestima. 

Es por esto que la familia USANA quiere acompañarte en el proceso de descubrir y sanar a tu niño interior para así, poder estar en paz contigo mismo y mejorar cada aspecto de tu vida. 

¿Cómo se manifiesta mi niño interior?

Si partimos de que este pequeño se encuentra en tu inconsciente, entonces, en gran medida aparece inconscientemente; y todo desde emociones espontáneas que a veces resultan ser negativas. 

Cuando te enfrentas a situaciones estresantes o desagradables le abres la puerta a tu niño interior, y comienzas a tener las mismas emociones que en la infancia. Por ejemplo, si en tu infancia escuchaste una pelea en la cuál te asustaste y reaccionaste con miedo; lo más probable es que ahora, en tu adultez, si escuchas alguna pelea, evocarás ese miedo y harás lo mismo que tu niño interior. 

¿Ahora entiendes por qué es de vital importancia sanarlo? Nuestro niño interior carga con heridas de toda índole, cada una de acuerdo al tipo de infancia vivida. Hay personas que tienen sentimientos de abandono o ira por no sentirse escuchadas. 

Lo importante aquí es conectar con tu niño interior y sanarlo; para que esas emociones que se presentan en situaciones diversas, sean más claras y sepas reaccionar ante ellas. 

¿Cómo encontrar a mi niño interior?

Todo está en tu memoria, trata de recordar cada etapa de tu infancia; puede ayudarte:

  • Observar tus fotografías de pequeño
  • Ver videos de tus fiestas infantiles 
  • Preguntarle a tus cuidadores de la infancia acerca de ti 
  • Evocar recuerdos con conocidos de tu infancia 
  • Escribir tus recuerdos 

Todo lo anterior te ayudará a encontrar a tu niño interno, recuerda que visualizarlo es el primer paso; ahora, tienes que ver cómo se encuentra y cuáles son las heridas que no ha sanado. 

Abrazando a mi niño interior

Ya que sabes dónde está y qué le sucede, es momento de abrazar y conectarte con tu pequeño interior. Lo más importante es ser consciente de que este proceso va a estar lleno de emociones, y que debes controlarlas para no asustar a ese pequeño ser. 

Observa qué emociones, conductas y pensamientos surgen al encontrar a tu niño interior, escríbelas y trata de calmarlo. Respira hondo,  todo va a estar bien. 

Ahora, aprende a escucharlo y aceptarlo tal y como es; dale consuelo y calma, medita junto a él. Enséñale que hay heridas que deben sanar juntos, y que ahora, buscas conductas mejores para él. 

Hazlo sentir valorado, protegido y escuchado; busca espacios seguros para que puedan estar juntos y así conectarse de una forma espiritual, que les permita sanarse uno al otro. 

Nuestro niño interior es la parte más vulnerable del actual “yo”; sé amable con él, no lo juzgues, abrázalo, ámalo y dale todo lo que pienses que necesita y que le hizo falta. ¿Qué le dirás a tu niño interior hoy?

La familia USANA quiere acompañarte en cada proceso de sanación, pues creemos firmemente que eso te ayudará a ser una mejor versión de ti. Esperamos que estos consejos te ayuden a conectarte con tu niño interior para sanarlo; recuerda siempre acercarte con un profesional de la salud para orientarte en tu búsqueda y mejora. 

Photo by Tanaphong Toochinda on Unsplash

Déjanos un comentario