El campeón en natación Marcos Zárate Rodríguez pensó abandonar todo en 2017.  Cuesta creerle, claro, si pensamos lo que vendría. 

En 2019 se convirtió en el deportista revelación de los Juegos Parapanamericanos de Lima al conquistar 7 medallas para la selección mexicana. Luego, en 2021, el nadador jalisciense impuso un récord mundial y ganó 5 medallas en la Serie Mundial de Para Natación en Berlín, Alemania. 

Ambos logros significaron un ascenso en su carrera deportiva que no llegó de sorpresa. Para el deportista, la disciplina y la perseverancia han sido clave para no desistir en los momentos más difíciles de su profesión.

“Muchas personas piensan que cuando te dedicas a esto de los deportes entras con mucho talento, creen que naces con talento, pero pues no, la realidad es que no, la realidad es que hay personas que quizás no tenemos ese talento, no nacemos con ese talento, pero sí la disciplina”.

En sus palabras, el entrenamiento constante, el compromiso y amor por la natación le han permitido seguir adelante pese a los obstáculos y sus propias limitaciones físicas. 

El ahora atleta USANA nos cuenta que comenzó su carrera a los 11 años de edad cuando practicó natación como parte de un tratamiento médico de rehabilitación.

“Mi carrera profesional inició a los 11 años cuando comencé a nadar por rehabilitación. Tengo parálisis cerebral y eso me dificulta mover mis piernas y brazos. Entonces para darme de alta médico en ese momento, me recomendaron hacer natación”. 

Sin embargo, en 2018, fue que empezó a representar a México en competencias internacionales. Tras cinco años de preparación y una crisis en 2017 que mantuvo  en vilo el futuro de su carrera durante algunos días. 

Duré cinco años sin poder ganar una medalla a nivel nacional. Entonces en 2017 yo decía que iba a abandonar todo, pero mis papás me dijeron que lo intentara una vez más, la última y ya, y ahí fue que la historia cambió”, comentó el nadador en una entrevista publicada el año pasado. 

Para Marcos, el apoyo de su padre y sus 2 mejores amigos también ha sido determinante para adaptarse a la sociedad con su discapacidad y mantener la constancia en el deporte. A ellos recurre para pedirles consejos y conseguir la motivación necesaria para enfrentar los nuevos desafíos. 

“Mi discapacidad sí es muy visible y me ha costado adaptarme a situaciones cotidianas como un estacionamiento o unas escaleras. También adaptarme a personas que no tienen discapacidad creo que ha sido un poco complicado, pero lo he logrado y superado con mayor autoestima y cercanía de mis seres queridos”, revela el atleta USANA.  

En sus palabras, tanto el darse cuenta que es igual a las demás personas como reconocer que su esencia es lo que marca la diferencia con respecto a otros atletas, ha sido fundamental para avanzar en su carrera, incluso cuando no satisface sus propias expectativas. 

El deportista confiesa que uno de los momentos más difíciles en su profesión ocurrió cuando no pudo clasificar a los  Juegos Paralímpicos de Tokio.

“Cuando no fui clasificado para los Juegos Paralímpicos de Tokio fue lo que más  me ha dolido en mi carrera. Yo aspiraba mucho a estar allí y disputar 4 pruebas, pero no fue así. Quedé muy cerca y creo que eso lo hizo más difícil”. 

La frustración de ese momento, reflexiona Marcos, la superó cuando se dio cuenta que quedó fuera de la competencia con buenos resultados,  con apenas 21 años de edad y muchas oportunidades por delante.

Además, agrega, la natación le ha permitido romper algunas barreras físicas, así como le ha regalado experiencias enriquecedoras. Una de éstas ocurrió cuando participó, junto a 17 atletas, en un campamento deportivo de una de las provincias más pobres de Cuba: Granma. 

“Recuerdo que nos fuimos a una de las zonas más pobres de Cuba. Allí tuvimos que sobrevivir en un país donde nunca habíamos estado, con dificultades para la comida y el agua, así como situaciones diferentes para entrenar […] Esa experiencia nos sirvió para valorar lo que tenemos, incluso para darnos cuenta que podemos sobrevivir sin celular”, comenta Marcos con una sonrisa. 

Mi entrenadora, fuente de inspiración.  

Al consultarle sobre las personas que le inspiran a diario, el deportista no duda en compartir el nombre de su entrenadora Claudia Gabriela Hernández. 

“Es una de las personas más profesionales que conozco. A pesar de que no tiene una trayectoria profesional tan conocida, su crecimiento es asombroso. Incluso me ha inspirado  a estudiar Ciencias del Deporte […] En un futuro me gustaría lograr algo de lo que ella ha logrado con sus atletas”, agrega Marcos.

Por último, sobre sus próximos planes, el nadador mexicano comenta que está entrenando a diario como parte de su preparación para el Campeonato Mundial de Para Natación Madeira 2022, que se llevará a cabo  entre el 12 al 18 de junio, en Portugal.  

Más adelante también planea prepararse para el desafío que supone clasificar para los Juegos Para Olímpicos París 2024 y representar a México con una destacada participación. 

Marcos Zárate es un deportista comprometido y disciplinado con la natación, que enorgullece a la familia USANA por su perseverancia para alcanzar los sueños y que estamos seguros seguirá sumando méritos por su esfuerzo constante. 

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